Calida sobre cantidad

Esta semana, debido a que me reincorporaba al gym después de estar practicamente 5 días de baja tras la fuerte bajada de potasio el martes 19, la he concluído (el fin de semana me lo tomo de descanso) con unas escasas 9 horas de entrenamiento, pero con la sensación de que estas las he aprovechado a tope y donde ha primado más la calidad de los entrenos que el volúmen de horas.

Durante estos últimos 2 años de entrenamiento, como he podido comprobar sobre mí mismo y también sobre los triatletas a los que preparo, he sido partidario de no abusar de los entrenos largos, especialmente en la carrera a pie (claramente por temas de impacto y desgaste articular) y centrarme más en trabajar los ritmos de competición y elevar al máximo el umbral anaeróbico, que viene a ser un factor determinante a la hora de obtener un buen rendimiento. Como detalle, decir que la tirada más larga de running que hice durante la planifición del Ironman Niza fue de 25 kms, entreno que repetí solo en un par de ocasiones.
Con la natación más o menos me pasa lo mismo. Vale que durante unos años he practicado a nivel competitivo waterpolo, pero igualmente mis entrenos se caracterizan por no pasar excesivas horas en remojo ni completar una montaña de metros, sino más bien nadar los justos pero con una técnica adecuada. Para que os hagais una idea, los entrenos que hice de natación la pasada temporada para preparar el Ironman de Niza tenían un volúmen medio de aproximadamente 2000-3000 metros, exceptuando alguno algo más largo, pero nunca pasando de la distancia "mágica", los 3800m. Y así logré hacer un parcial en el agua de 1h01', con el que estoy muy satisfecho.
De esta forma, quitando minutos de entrenos en la carrera y en el agua, podemos ganar horas sobre la bici, que nos ayudará a mejorar también luego en la carrera a pie, ya que tiene bastante transferencia. Podríamos decir a nivel general, pero siempre con excepciones, que si eres bueno sobre la bici luego, disponiendo de una buena técnica de carrera, también serás bueno corriendo.

Obviamente éste es mi punto de vista y cada entrenador/deportista pondrá en práctica el que mejor le vaya a él, que puede ser uno totalmente opuesto a lo que pienso yo. Porque en el entrenamiento deportivo 1 + 1 no siempre son 2.

Dejando de lado este punto de vista que he expuesto, ayer acabé muy satisfecho con el entrenamiento de carrera. Hice 16 kms (Áccura Port Ginesta) a un ritmo medio de 3'58/km, en 1h03', repartidos en 2 bloques. Del km 0 al 10 a 4'02''/km (40'20'') y del 10 al 15 a 3'51''/km (19'13''). Las pulsaciones medias del entreno  fueron 162, es decir, por debajo del umbral anaeróbico, que lo tengo en las 170 p/m.
Fue un entreno que me da mucha confianza para afrontar a tope la media maratón de Gavá el 21 de febrero y  después la Maratón de Barcelona, el primer gran objetivo de la temporada. A parte, añado las 2 clases de spinning de ayer más la de esta mañana.