Entre los datos antropométricos más relevantes de la revisión están los 65’2 kg de peso (lo dicho, fino como un spaghetti) y el 10’2% de porcentaje de grasa total. En este aspecto he de decir, que bajar mucho más de aquí sería un “riesgo” para cualquier triatleta de larga distancia, ya que las reservas de grasa podrían verse comprometidas para un esfuerzo tan prolongado como es el Ironman.
En cuanto a la valoración funcional en esfuerzo, realizada sobre una bici estática (cicloergómetro), decir que el protocolo que ha utilizado en mi caso es una prueba de esfuerzo submáxima indirecta, con un incremento de 35w cada minuto.
La prueba la hemos finalizado al terminar el estadio de los 350w, llevando una frecuencia cardíaca en ese momento de 174 lpm. El índice ergométrico w/kg es de 5’37 y el PWC 150/kg (Power work capacity) es de 5’24.
Comentando con él después la gráfica de las pulsaciones/watios, hemos podido establecer más o menos unas zonas de intensidad para el trabajo en bici:
- Zona aeróbica ligera: 90-125 lpm
- Zona aeróbica media: 125-150 lpm
- Zona aeróbica intensiva: 150-160 lpm
- Zona transición (umbral anaeróbico): 160-165 lpm
Por lo que respecta a los entrenamientos, ayer miércoles hice dos clases de spinning (1h30’) y 1h02’ de running a ritmo IM, para completar 13’5 kms a 4’34/km.
Hoy jornada de descanso :-D
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